La primera dama de Estados Unidos, Melania Trump, hizo un llamado a acabar con la política de separación de los padres e hijos que ingresan ilegalmente al país desde la frontera con México.
La esposa del presidente "cree que necesitamos ser un país que respeta las leyes, pero también un país que gobierna con corazón", dijo su portavoz en un comunicado.
Melania Trump sorprendió al romper su silencio habitual y decidir opinar sobre una de las cuestiones más discutidas actualmente de la política del país.
Añadió que "odia ver niños separados de sus familias y espera que ambos lados [republicanos y demócratas] puedan finalmente unirse para lograr una reforma migratoria exitosa ".