Una mujer de Nueva Hampshire, Estados Unidos, ganó casi US$560 millones en un sorteo de la lotería Powerball en enero, pero todavía no ha podido cobrar el premio.
La ganadora firmó con su nombre el boleto ganador, como indican las reglas del sorteo, pero ahora afirma que esto fue un "gran error" pues le gustaría mantener el anonimato.
Según la ley de Nueva Hampshire, el nombre del ganador, la ciudad y el monto que recibe son registros públicos.
Esta norma se puede evitar pidiendo el dinero a través de un fideicomiso, pero para ello el boleto tendría que haber sido firmado por el administrador del fondo.
Y cualquier alteración de la firma de la ganadora podría anular el boleto.