El fútbol vivió uno de sus momentos más conmovedores durante el encuentro entre Puntarenas FC y San Carlos, equipos de Primera División de Costa Rica. Cuando el volante Dariel Castrillo recibió una devastadora noticia minutos antes del inicio del cotejo: el fallecimiento de su padre de crianza, Jason Torrentes.
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Lejos de dejarse vencer por el dolor, el jugador decidió salir al campo con el corazón en la mano y una convicción admirable.
Su entrega fue total, y su actuación clave: fue él quien asistió al panameño Alexis Cundumí, autor del único gol del partido que le dio la victoria a su equipo.

Celebración entre lágrimas y ovación del público
Tras la anotación, sus compañeros se unieron en un gesto de solidaridad. Se arrodillaron junto a Castrillo, lo abrazaron y lo acompañaron en uno de los momentos más emocionales de la temporada. La afición presente en el estadio Miguel “Lito” Pérez respondió con una ovación cerrada.

En el segundo tiempo, Castrillo no pudo contener el llanto, visiblemente afectado por la pérdida. Aun así, permaneció en cancha hasta el minuto 72, cuando fue sustituido entre aplausos.
El respaldo del equipo
El técnico Alpízar destacó la entrega del jugador y la fortaleza emocional del equipo.
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“Es difícil, pero este grupo está unido. Hoy, Dariel nos dio una lección de amor por el juego y compromiso”, expresó el DT, quien explicó que la noticia se conoció minutos antes del pitazo inicial.