La deportista Lisseth Ayoví no trajo una medalla olímpica pero sí contagió al planeta con su buena vibra. Se ganó un diploma por el cuarto lugar en que quedó. A su llegada a Machala, la recibieron como se merece y más. Incluso, se le cumplió uno de sus más grandes deseos.
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La ecuatoriana recibió una casa después de su destacada participación en los Juegos Olímpicos. Ayoví recibió las llaves de su casa de parte del alcalde Darío Macas y junto a ‘Bananerito’. Tras ello, la atleta machaleña dio unas palabras por tan emotiva sorpresa que estuvo acompañada por un pastel color rosa.
El reconocimiento fue con autoridades y su entorno en las instalaciones de la alcaldía machaleña. La recibieron con el canto de cumpleaños y sopló las velas en un pastel.
La reacción de Lisseth
Cuando le dieron en una cajita, las llaves de su vivienda, la deportista quedó toalmente sorprendida y no pudo contener las lágrimas.
“No tengo palabras. Es tanto el sacrificio que he hecho durante mi carrera deportiva. Lograr un hogar no es nada fácil y lo he venido haciendo con todo lo que he ganado. He soñado siempre con eso y, gracias a Dios, se hizo realidad”, mencionó la joven.
Según la alcaldía, la casa es de dos pisos en una urbanización en la ciudad de Machala.