A principio de la temporada, Erik ten Hag fue uno de los hombres más criticados en el Manchester United, luego de que el funcionamiento del equipo no había alcanzado su punto máximo.
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Además, el timonel neerlandés era señalado por la poca participación de Cristiano Ronaldo en el campo, pero él siempre argumentó que el portugués no estaba en su mejor momento.
Erik ten Hag, el nuevo Fegurson del Manchester United
La tensión fue creciendo entre Erik y CR7, por lo que la directiva apoyó al estratega y culminó el contrato del atacante, situación que detonó más críticas para el director técnico.
Cristiano se fue molestó del Manchester United y señaló al neerlandés, asegurando que le faltó al respeto a su carrera deportiva.
Sin embargo, Ten Hag ignoró los comentarios y siguió trabajando, con la intención de recuperar al equipo, que ha pasado años grises.
Un nuevo método
El timonel neerlandés hizo que la directiva contratara a jugadores con los que había participado en el Ajax. El primero en arribar fue Lisandro Martínez.
El central argentino llegó sin un rol estelar al United, pero sus actuaciones tienen fascinados a los fans, por lo que ya corean su nombre.
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Misma situación vive Anthony, por el que Ten Hag peleó a muerte para que el club pudiera contratarlo, ya que sabía perfectamente lo que ganaría con él en la ofensiva.
La última incrustación fue Casemiro, quien dejó al Real Madrid para comenzar una nueva etapa en su carrera.
De hecho, el brasileño está sorprendido con el método que implementó Erik en el Manchester United, el cual nace del pensamiento de sólo ganar.
Y es que, el conjunto rojo estaba inmerso en una crisis de resultados, principalmente con la moral destruída por los fracasos acumulados en los últimos años.
Pero el neerlandés llegó a cambiar el chip y recuperó la esencia con el trabajo diario, así como el pensamiento claro de que el equipo debe ganar siempre.
“Creo que su obsesión por ganar es lo que más me sorprendió, y tiene muchos puntos fuertes. Todos sabemos que esto es un proceso, pero podemos ver que quiere ganar. Su obsesión por querer enseñarnos y dejar todo perfecto al milímetro es clave. Su obsesión por ganar es algo que sólo unos pocos entrenadores tienen. En realidad, es algo que he visto en muy pocos técnicos”, detalló Casemiro.