Lionel Messi se prepara para la final, puede ser la última, que enfrentará con la Selección de Argentina a Italia. El astro rosarino, ahora estrella del PSG, tendrá la oportunidad, conjuntamente con sus compañeros, de demostrar que son los gran favoritos para Qatar 2022. (Conoce las árbitras que pitarán en el Mundial).

En una reciente entrevista con el medio TyC Sports, Lio confesó las peripecias que ha tenido que pasar, la que más sorprendió fueron los estragos que la covid-19 le dio. Más allá de los síntomas, las secuelas fueron las que más pasaron factura a uno de los mejores jugadores del mundo.

“Me dejó muchas secuelas en los pulmones. No podía entrenar. Volví y estuve como un mes y medio sin poder ni siquiera correr porque me había afectado los pulmones”.

Entre los síntomas que presentó estuvieron la tos, dolor de garganta y fiebre. “La verdad es que me pegó muy fuerte”, ratificó.

El peor dolor

Messi añadió que después de recuperarse de la covid-19, su estado físico apenas se estaba acoplando y la presión que sentía sobre él por parte de la afición lo instaba a estar al 100% lo antes posible. Aunque el peor dolor que tuvo, más allá de la enfermedad, fue la eliminación de la Champions League propinada por el Real Madrid.

“Después cuando estaba medio ahí pasó lo de Real Madrid y eso nos mató. A mí a todo el vestuario en general, a todo París, porque teníamos una ilusión bárbara en esa competición, y más cómo fue el partido, el resultado fue un golpe”.

Salida del Barcelona

Para el argentino su vida fue el club culé. Además, la ciudad de Barcelona fue prácticamente su hogar principal al residir más tiempo ahí que en su natal Argentina. No obstante, su paso a París le pegó más a él y a su esposa Antonela Rocuzzo (así ha sido el cambio de la esposa de Messi) pero no a sus hijos.

“La verdad es que no tenía pensado cambiar nada. Por suerte la adaptación de los nenes fue espectacular. Para Antonela y para mí fue más difícil”, ratificó al periodista Gastón Recondo.