Con el brillo en sus ojos y la alegría contenida en cada abrazo y palabra de agradecimiento, las niñas y niños de la Fundación Albergue La Dolorosa recibieron una donación de 11 computadoras y regalos por parte de la Universidad Internacional SEK. Este acto es parte de las actividades del Proyecto “Vinculación con la Comunidad” que realizan las estudiantes de 6to semestre Psicología en esta institución.
Los resultados son exitosos, señala Paola Boza, encargada del albergue, quien asegura que los niños reforzaron sus valores y se muestran más empáticos y solidarios desde las intervenciones realizadas por la UISEK. Rocío Játiva, docente y Coordinadora de Vinculación con la Comunidad de la carrera, asegura que este logro es un trabajo en conjunto de los docentes, el Centro de Atención Psicológica de la Universidad a cargo de Virginia Polit y las estudiantes.
Además de trabajar con los niños, la UISEK ofreció atención psicológica para los cuidadores del albergue. Játiva menciona que en la mayoría de proyectos sociales es común que no se visibilice el papel que cumplen los cuidadores de los niños y adolescentes, a pesar de que cumplen un rol fundamental en su desarrollo. “Para que ellos estén bien, nosotros también tenemos que estarlo”, expone Jacqueline B., cuidadora del lugar desde hace 10 años que, al no tener hijos propios, halló en el Albergue una familia.
De esta manera, el proyecto abarcó un taller denominado “Cuidado al Cuidador”, en el que se ofreció soporte y herramientas psicológicas para evitar el desgaste emocional que pudiera originarse al trabajar con niños y adolescentes que llevan tras de sí, historias de mucho dolor o abandono.
Karen C., una de las estudiantes que participó del proyecto, agradece con gran satisfacción la oportunidad de haber contribuido con un “granito” de conocimiento y alegría a quienes más lo necesitan. Su vocación por ayudar transciende las aulas y señala que esta actividad la ha llevado a tomar la decisión de seguir transformando vidas desde la psicología, en lugares con similares condiciones.
Gracias a la UISEK, las niños y niños del Albergue La Dolorosa podrán contar con recursos tecnológicos para sus estudios; mientras que los regalos dejan una huella de cariño de quienes, por cerca de 6 meses, se convirtieron en sus guías emocionales.