Priscilla Altamirano, CEO de Almacenes De Prati, suma una trayectoria de más de 20 años en la empresa que le ha permitido crecer y demostrar su talento en el sector ‘retail’.
Su trayectoria en la empresa inicia en el año 2000 cuando fue contratada como traductora del gerente general de compras de aquella época. Tras un recorrido por el área comercial, esta Química Farmacéutica lidera la empresa que transformó los conceptos de tienda departamental en Ecuador.
De Prati es la tienda departamental dedicada desde hace más de 80 años a acompañar a las familias ecuatorianas ofreciendo productos y servicios en sus distintas categorías: Ropa, Belleza, Hogar y Tecnología.
-¿Cómo una Química Farmacéutica se convierte en la CEO de una empresa del sector Retail?
— Una pregunta similar le hice a mi jefe hace varios años cuando me dio la oportunidad de incorporarme al área comercial, me contestó que me había elegido a mi ya que siendo química farmacéutica entendía de crear, de procesos y tener la vocación para el cargo.
Empecé desde el nivel más bajo, durante las mañanas continuaba de traductora y en las tardes como compradora en entrenamiento, y es así como empieza mi carrera en Almacenes De Prati.
-¿Cual crees que ha sido la clave para llegar al lugar dónde estás?
— Logré entender el engranaje que tiene que darse para servir al cliente, tanto en el área Comercial, Tiendas, Visual Merchandising, Crédito, Recursos Humanos y otras.
De tal manera que cuando empecé mi carrera –al poco tiempo-, me pude dar cuenta que se requería de una segmentación de productos, irnos por segmentos de vida, quién era más clásico, contemporáneo o tradicional.
En De Prati el valor de los detalles realmente hace la diferencia para todos nosotros. Cuando llegué a ser líder de la compañía llegué con todo este ADN de lo que es el cliente y se me hizo más fácil fluir.
-¿Cuál es la historia de la empresa?
— La historia de De Prati inicia a finales de los años 20′ con el sueño de dos visionarios italianos, Don Mario De Prati y Doña Doménica Cavanna, quienes llegan a la ciudad de Cuenca desde Italia y emprenden nuevos retos.
Pero fue en 1940 cuando ellos deciden montar su propio almacén de venta de tejidos importados y abren en Guayaquil su primer local bajo el nombre de Mario De Prati. Años más tarde expandiría su línea hacia artículos del hogar.La primera tienda de Almacenes De Prati se levantó en el mismo lugar donde está en la actualidad, en las calles Luque y Chile.
-¿Ustedes fueron la primera empresa comercial en abrir una línea de Crédito De PratI?
—Somos pioneros y sin lugar a duda el Crédito De Prati es el primero al que tienen acceso muchos ecuatorianos.
En 1968 se inicia el sistema de Crédito De Prati, para que los clientes accedieran a mejores planes de financiamiento y beneficios exclusivos, convirtiéndose en uno de los principales diferenciadores de la compañía.
-¿A través de sus tiendas otros emprendedores o proveedores ecuatorianos tienen la oportunidad de vender sus productos?
—En 1973 la compañía abre la Boutique 33 e impulsa el desarrollo de proveedores nacionales, desde entonces De Prati tiene la filosofía de desarrollar la industria local, la cual se mantiene y se fortalece año tras año.
El 70% de las compras que hacemos son locales, esto ha implicado un gran esfuerzo de la compañía y nos sentimos muy complacidos de habernos convertido en un motor de desarrollo para la industria nacional.
-¿Cómo fue el giro del negocio hacia el mundo digital?
—Tenemos más de 14 años operando nuestra página deprati.com, haciendo posible que los ecuatorianos puedan acceder a nuestros productos desde cualquier punto del país.
Hace más de una década identificamos la necesidad del desarrollo del mundo virtual que hoy se ha visto fortalecido con nuevos desarrollos tecnológicos, este camino recorrido nos mantiene en constante evolución e incorporando mejoras que logren una experiencia de valor para nuestros clientes.
-¿Y cómo han sobrellevado esta época de pandemia?
—En esos momentos de dificultad, nuestra prioridad fue proteger a nuestros colaboradores y clientes. Todos los espacios y las distintas operaciones de De Prati adoptaron los protocolos de bioseguridad así como también se abrieron espacios virtuales para compartir lo que estábamos viviendo. Estos encuentros fueron muy bien valorados por nuestro personal quienes en todo momento demostraron su compromiso, como resultado de una cultura basada en la confianza, respeto y valores.
De este año de crisis, debemos rescatar los aprendizajes obtenidos, así como revisar nuestro modelo de negocio. Los cambios que trajo la pandemia han llegado para quedarse.
- ¿Cuántas tiendas tienen a nivel nacional y en qué modalidad de trabajo operan?
— Contamos con 14 tiendas ubicadas en Guayaquil, Quito y Manta y la tienda en línea deprati.com con envíos a todo el país.
Nosotros seguimos en modalidad dual: home office y semipresencial, porque la pandemia nos ha enseñado que se puede manejar un trabajo remoto selectivamente y al mismo tiempo nos ha enseñado la importancia de la interacción presencial, hay que encontrar el balance equilibrado.
- Cuéntanos sobre la experiencia de compra en De Prati.
— Con el objetivo de cumplir con las expectativas del cliente, De Prati se ha encaminado hacia la omnicanalidad, integrando la experiencia física y digital. Buscamos ajustar procesos y sistemas para ofrecer soluciones funcionales y herramientas dinámicas que sean flexibles al cliente, ofreciéndole, ya sea a través de la tienda deprati.com con envíos a domicilio, la alternativa de “retiro en tienda” o en más de 150 puntos de terceros a nivel nacional, comprar a través de nuestros vendedores digitales, la app y el uso de kioskos virtuales para acceder a servicios, productos y facilidades de deprati.com.
-¿Proyectos a futuro?
— Uno de nuestros principales objetivos es expandir nuestras tiendas a lo largo del país, pues buscamos estar en más lugares y atender a más personas. Adicionalmente nuestros planes a futuro incluyen el fortalecimiento de nuestra plataforma digital, la concepción de nuevas mejoras logísticas con el objetivo de seguir avanzando en el camino de la transformación digital.
-¿Han forjado un camino en la creación de programa pro mujeres?
— De Prati busca generar valor a la sociedad, con una gestión responsable. Por ello, trabaja para alcanzar el desarrollo sostenible a lo largo de toda la cadena de valor. Parte importante de esta labor se cristaliza con la ejecución de iniciativas que aportan a la comunidad, como el Programa Mujeres Confeccionistas Emprendedoras que, en alianza con la Fundación Acción Solidaria, se lleva a cabo desde el 2014 en Guayaquil, el 2015 en Quito, y el 2018 en Manta, creado para capacitar en técnicas de costura y confección a mujeres de zonas vulnerables.
Gracias al programa Mujeres Confeccionistas Emprendedoras, más de 730 mujeres se han empoderado y tomado nuevamente el protagonismo de sus vidas.